Terapia fotolumínica
Terapia fotolumínica
Con la terapia fotolumínica se pueden tratar las manchas o hiperpigmentación, cuperosis y capilares rotos, rojeces, pequeñas arrugas y laxitud, poros dilatados y secuelas de la acción solar.
Pone en marcha el proceso natural de reparación de la piel y como consecuencia el tono se unifica, mejora la calidad y le devuelve un aspecto suave y terso, proporcionando un aspecto rejuvenecido.